La vitamina A ayuda a la formación y al mantenimiento de dientes, tejidos blandos y óseos, membranas mucosas y piel sanos. Se conoce también como retinol, ya que produce los pigmentos en la retina del ojo.
Esta vitamina favorece la buena vista, especialmente ante la luz tenue. También juega un papel para tener un embarazo y una lactancia saludables.
La vitamina A se encuentra de dos maneras:
Retinol: el retinol es una forma activa de vitamina A. Se encuentra en los hígados de animales, la leche entera y algunos alimentos fortificados.
Carotenoides: los carotenoides son tintes (pigmentos) de color oscuro. Se encuentran en alimentos de origen vegetal y que pueden transformarse en una forma activa de vitamina A. Hay más de 500 carotenoides conocidos. Uno de ellos es el betacaroteno.
El betacaroteno es un antioxidante. Los antioxidantes protegen las células del daño causado por sustancias llamadas radicales libres. Se cree que los radicales libres:
- Contribuyen al desarrollo de ciertas enfermedades prolongadas y
- Juegan un papel en los procesos del envejecimiento.
Al comer alimentos con fuentes de betacaroteno, pueden reducir el riesgo de cáncer.